Es actriz, bailarina y cantante, y ha conseguido triunfar en televisión gracias a series como «Un paso adelante» o «El Internado», que, tras el éxito de las dos primeras temporadas, regresa el próximo 23 de abril a Antena 3. Pero, gracias al concurso «Tienes Talento» (Cuatro), el público ha descubierto una faceta desconocida de Natalia Millán, la de jurado. Muy diferentes a otros jueces televisivos, Millán y sus compañeros, Josep Vicent y Miqui Puig, están en la recta final del programa, cuya final se emite el próximo lunes 21 de abril.
«Tienes Talento» está llegando a su recta final ¿cómo ha sido la experiencia?
Ha sido interesante porque es completamente diferente a todo lo que había hecho hasta ahora. Es otro mundo dentro de la ‘tele’ que no tiene que ver con la ficción y me ha gustado haberlo visto desde dentro.
¿Le ha resultado difícil meterse en el papel de jurado?
No es nada fácil. Intentas tener un criterio justo pero es muy difícil porque son personas de diferentes ámbitos, unos profesionales y otros no, y hay veces que no sabes donde poner el baremo. No es un trabajo fácil, creo que me quedo con la ficción.
¿Se ha llegado a implicar personalmente?
Sí, porque no te expones a través de un personaje. Lo más duro ha sido enjuiciar el trabajo de la gente porque empatizas mucho y te identificas, sabes lo que es estar al otro lado.
¿Qué modalidad artística le gustaría que ganara el concurso?
No lo sé. Ha sido un descubrimiento para mí la parte de las acrobacias y lo circense, me ha impactado. Pero
hay músicos, cantantes, bailarines… casi cualquiera de los que están en la final, si ganara, me parecería maravilloso.
¿Cómo ha sido la relación con sus compañeros de jurado?
Muy intensa. Lo más bonito es que los tres sentíamos esa responsabilidad de que nuestra decisión influiría en el futuro inmediato de una persona. Teníamos en cuenta que podíamos cambiar la vida de la gente.
Este jurado es muy diferente al de otros programas como «Operación Triunfo», ¿qué le parece que sean tan agresivos?
Desde mi experiencia, creo que es muy importante respetar al que está en el escenario. Yo empatizo mucho e intento dirigirme a estas personas con el máximo respeto porque sabes lo difícil que es estar allí arriba.
En «Tienes talento» critica que concursen niños pequeños y, sin embargo, en la serie «El Internado» trabaja con niños…
Sí, pero este programa es muy cuidadoso con ese tema; se respetan temas de horario.
¿Qué novedades trae la tercera temporada de «El Internado»?
No lo sé, no me lo han contado! En principio, sigo de directora y nos está costando entendernos a Héctor (Luis Merlo) y a mí.
La segunda temporada tuvo un final muy dramático para su personaje, ¿qué le deparará el futuro?
Lo primero es saber si vamos a encontrarla porque, con aquel final, no se sabe. La verdad es que sigue viva y con ganas de pelear.
Casi todas las tramas pasan por su personaje ¿no?
Sí, un poco desde la ignorancia del personaje, pero se cruzan todas. Los actores sabemos muy poco y muchas veces queremos enterarnos de qué va a pasar de verdad, pero los guionistas mantienen el secreto bajo llave.
No cree que las tramas se han vuelto algo enrevesadas?
Sí, son muy complicadas. Para nosotros es dificilísimo y, a veces, nos planteamos cómo va a acabar esto.
Sin embargo, «El Internado» es una de las ficciones más consolidadas y con más seguidores… Afortunadamente, ha sido una serie muy premiada y espero que continúe así. Cuando algo es celebrado hay que mantenerlo, que no es fácil, y nos ayuda el hecho de que es una serie única en su especie. Recuerdo que en las primeras ruedas de prensa nos preguntaban si la serie iba a ser como «Harry Potter».
fuente: El Correo Gallego (13.04.2008)